El pasado jueves 16 de enero, elementos del Ejército y Guardia Nacional lograron decomisar 24 cámaras de videovigilancia, las cuales estaban instaladas de manera ilegal en los municipios de Tuxpan y Ozuluama.
La acción se llevó a cabo como parte de los operativos para retirar y confiscar cámaras de vigilancia que no sean parte del gobierno. Esto con el objetivo de debilitar la estructura de las organizaciones criminales.
Las cámaras son utilizadas para vigilar a la ciudadanía y poder verificar dónde se encuentran los elementos de seguridad durante sus rondas de vigilancia.